¡Esperanzas y sueños para un nuevo año!

El comienzo de un nuevo año es a menudo un momento de reflexión sobre el año que acaba de terminar y un momento para establecer metas e intenciones para el año que viene. Esta es una práctica empoderadora en la que podemos involucrar a nuestros hijos. Si comenzamos a reflexionar y establecer metas con nuestros hijos cuando son pequeños, se convertirá en un hábito que podrán llevar consigo en su vida adulta.

Paso uno: ¡reflexión!

“Sin reflexión, seguimos nuestro camino a ciegas; creando más consecuencias no deseadas y no logrando nada." (Margaret J. Wheatley)

Modelar la reflexión para los niños y enseñarles esta poderosa herramienta les ayudará a darse cuenta de cuánto han crecido durante el último año. También les hace pensar no sólo en sus logros, sino también en áreas en las que les gustaría ver un mayor crecimiento en ellos mismos. El fracaso es una parte muy importante del crecimiento y el éxito. Reflexionar sobre lo que salió mal, ideas sobre cuáles son sus nuevas metas a causa de ello y generar una lluvia de ideas sobre nuevas formas de lograrlas son los pilares de una mentalidad de crecimiento y creatividad.

Esta es una oportunidad increíble para conectarse profundamente con sus hijos, brindarles tiempo para abrirse y darles espacio para respuestas más sustanciales. Todos conocemos las conversaciones:

"¡¿cómo estuvo su día?!"

"BIEN"

"¿Qué hiciste hoy?"

"Nada"

Iniciar un ritual de reflexión ayudará a los niños a aprender a tomar nota de sus sentimientos y les ayudará a recordar más detalles de sus días.

Aquí hay algunas preguntas que puede discutir con los niños para desarrollar estas habilidades:

• ¿Qué cosas nuevas aprendiste el año pasado?
• ¿Qué puedes hacer ahora que no podías hacer hace un año?
• de que estas mas orgulloso?
• ¿Hay algo que no pudiste hacer y que te gustaría pensar en hacer este año?
• ¿Qué nuevos amigos hiciste el año pasado y qué te gusta de ellos?
• ¿Cuál fue tu mayor desafío el año pasado y cómo lo superaste?

Paso dos: ¡soñar y fijar metas!

Después de reflexionar sobre el año pasado, es hora de empezar a fijar metas e intenciones para el nuevo año que se avecina. Algunas de las ideas pueden extraerse directamente de las reflexiones cuando los niños hablaron sobre las cosas que no pudieron hacer o sobre sus mayores decepciones. Este es el momento de pasar soñando, riendo y creando tu “año perfecto”. No subestimes el tiempo que dedicas a soñar. Fortalece la imaginación de los niños y les muestra que todo lo que puedan pensar puede hacerse realidad con un plan.

La forma más productiva de configurar tu ritual es comenzar con tus intenciones. Estos grandes sueños. Luego divídalos en objetivos más pequeños. Estos objetivos deben tener cronogramas o formas de seguir su progreso. Puede dividir cada objetivo en pasos de acción más pequeños para los niños y ayudarlos a tomar medidas cada día, o utilizar sus objetivos como guía para recordarles el camino que quieren tomar.

Establecer metas individuales:

Modele el establecimiento de metas para los niños y pídales que establezcan sus propias metas. Cuando hable con los niños sobre sus objetivos, haga una lluvia de ideas sobre cómo pueden hacer que esos objetivos se conviertan en realidad. Divídalos en pequeños pasos alcanzables. Pregúnteles cómo se sentirán cuando hayan logrado su objetivo. Para mantener a sus hijos encaminados y no sentirse abrumados, celebrar todos los pequeños éxitos a lo largo del camino hace que lograr sus grandes sueños sea emocionante, divertido y empoderador.

Establecer metas e intenciones familiares para el año:

Esta es una actividad emocionante en la que todos pueden participar. La camaradería y el respeto se construyen a través del trabajo en equipo y haciendo que todos los miembros de la familia se sientan escuchados y apoyados. Aquí hay algunas ideas de preguntas que puede hacer al establecer sus objetivos:

• ¿Qué te gustaría hacer más en familia?
• ¿En qué áreas podemos trabajar juntos?
• ¿Qué pasos deben seguir todos para que esto suceda?
• ¿Cuál es tu gran sueño familiar para este año?
• ¿Es un lugar que te gustaría visitar?
• ¿Cómo pueden todos apoyarse unos a otros para alcanzar las metas familiares e individuales?

"Siempre parece imposible hasta que se hace". (Nelson Mandela)

Planificar su nuevo año, soñar con sus grandes éxitos y establecer metas es a la vez emocionante y abrumador . Los grandes sueños pueden parecer imposibles y convertirse en la razón por la que la mayoría de nosotros no empezamos a actuar. Aprender a convertir los sueños en pequeñas metas manejables permite a los niños ser independientes, fortalece su confianza en sí mismos y les muestra que sus sueños son alcanzables cuando actúan. ¡Ahora lo que queda es celebrar tu éxito!